martes, agosto 07, 2007

Carta a un amor asesinado





Quería escribir una carta hace años, una carta que debía entregar hoy, una misiva con destinatario karmático. Lo conocí y esperé muchas veces que me hablara de ella, pero ese día nunca llegó. Quería decir que cuando dije te amo era cierto, que las noches que escapé buscando algo que tranquilizara el horror, el horror que marca el reloj en mis entrañas, no eran sino un corte en la grabación de una vida instalada en medio de la prisa. Quería contar que los dolores sentidos y que las mentiras expresadas, construyeron entregas a destiempo, como bocanadas de oxigeno para un enfermo terminal. Y qué paso?

Concilio el sueño a destiempo
mientras masturbo los recuerdos que se atropellan peleándose la permanencia
De vez en cuando un tren pasa en medio de mis entrañas
provocando un temblor semejante a la muerte.

Y la pregunta se instala como una luz intermitente ¿qué paso?
acaso las tardes...
la impaciencia que...
o la verdad no...
los sueños nos habrán mentido o nosotros a ellos...

Una vez más visto de riguroso negro

Mientras te llaman como te llamaba
sin conocer el origen del bautizo
Porque el tiempo juega a extenderse
cuando te nombro sabiendo que oyes la palabra que no tiene voz