miércoles, diciembre 26, 2007

Estos mares aquí dentro


Cuando tu boca dice llegar tarde

Y la mía nunca se ha ceñido al tiempo

Leyes inventadas con un vaso de cerveza y el desamor anidado en el corazón


Y que puedo yo hacer

yo que nací sin ganas de luchar y siempre acabo en guerras

y cargo decenas de heridas que no hablan

y las alarmas no funcionan cuando el peligro acecha

porque nunca escuché al miedo burlón en mi oído


Y tu mano tropieza con mi boca y me pides un beso

Mientras camino despistada entre canciones y muebles

Y te cuento que no puedo controlar estos mares aquí dentro

Que no quise aprender mañas de soldado inválido

que nací bajo el arcano de la muerte

y que todo en mi vida ha estado regido por las mutaciones

y me pides calma, mientras enredas tu mano en mi pelo y yo hago lo propio en el tuyo

y te quedas como escondido

enterrado en mi pecho, asustado, como escapando del afuera

descansando en los brazos que nadie te aconseja.


Perséfone


Micah P. Hinson



martes, diciembre 18, 2007

La memoria, ufff, la memoria.



Sábado, recuerdo ese sábado, con la luz golpeando la ventana que sin preguntarnos la dejo pasar, los ojos, los ojos no queriendo ver nada más que los sueños reversos…

Tu boca seca, tus manos con algo que llamabas ferroso, un polvo negro que las manchaba a modo de minero, las mismas que en la noche habían tocado más allá del límite público, sitio hasta donde tu lengua llegó rabiosa y con dientes, esa que después saboreaba con la misma intensidad un plato de cebiche peruano en un sitio de Bellavista, enjugando tus secos labios con cerveza Cuzqueña y tapando tus ojos con lentes de sol. No sé por qué, pero te dio por agarrar el papel de mafioso y llamabas por su nombre al mesero, que nos pasó gato por liebre hasta que te diste cuenta y gritaste Paul, lease P.A.U.L (Literal se entiende) con cara de pocos amigos, ¿será que me gusta el poder? Pero me seduce esa manera tuya de poner las cosas en su lugar cuando se están pasando de listos, será que mi diplomacia siempre me lo impidió y es notable que alguien lo haga, no lo sé, pero me erotizas.

Me gusta tu mirada cuando estas sobre mi, me gusta tu mirada cuando estas bajo mis piernas y me gusta tu mirada cuando estas en mi espalda. Me excitan tus quejidos
¿Sabrán los hombres que a nosotras nos encanta que se quejen suave?, se me eriza la piel en medio de la oficina, mientras el francisco pincha sus discos de acid jazz y me mira como queriendo saber que mierda pienso, que tiene el teclado que tengo esa cara de querer arrancar un pedazo de tu boca y desarmar esa postura de niño serio, que parece controlarlo todo menos su deseo.

Creo que hoy me iré a casa pensando en ti, pondré un disco de Thievery Corporation y dejaré que mis manos y mi mente hagan el resto, maldición ya deben ser las seis y media!!!.

Emilie Simon / Désert (Thievery Corporation Mix)




viernes, diciembre 07, 2007

Asi soy

Vas a decirme que las hojas no están verdes en primavera y que los elefantes no pasean en mi cocina, quieres decirme que lo que soy es una fantasía que invente para que nada doliera…

No me digas que hacer a las tres de la madrugada que no oigo,

No inventes amantes en mi closet

seria el último sitio donde los llevaría…

Ya sabes que el humor es uno de mis fetiches y te he visto enojado demasiado tiempo, me gusta fumar un cigarrillo de vez en cuando y caminar sola o con quien yo quiera, odio que alguien baje la música cuando la estoy oyendo, es interrumpir un acto de divino! Canto cuando estoy triste, porque la alegría ocupa demasiado tiempo.

La paciencia no es uno de mis dones, pero suelo comprarla por algún motivo

Se que Jack Nicholson en Mejor Imposible es más agradable que yo en mis malos días, pero también sé que puedo hacerte feliz en los buenos

Me muero de ganas por comer un helado más de lo que yo quisiera y vivo despistada, como en un mundo paralelo.

Amo a la Sofía cada día más y podría pasarme horas conversando con ella, oigo sobre sus gustos y las peleas con sus amigas, el niño que le gusta y el que no, la música que la hace bailar y a mi rabiar

No sé si me estoy volviendo vieja a los 33, pero extraño a mis hermanos y a mi mamá, me dan ganas de estar pegada a ellos mucho más tiempo del que jamás quise estar, y mis amigos, mis amigos se han vuelto un lugar donde deposito ternuras sin freno, siempre estuvieron ahí sólo para escuchar mis locuras, alegrías y penas, siento que ahora me importan más.

Con todo esto podrías decir que me conoces algo, ¡¡ah!! se me olvidaba una cosa, no me gusta la tapa de la pasta dental abierta, los cigarros no se apagan en el WC y me encanta cuando cocinas para mi y me haces cariño en el pelo al amanecer.