viernes, enero 26, 2007

Nada Perfecto y mi amigo ET




Andábamos monje y yo buscando el sitio exacto del bar donde “tocaría” mi amigo pescador, tras incansables 24 minutos llegamos al mentado sitio y que había en el lugar, “Nada Perfecto” (así de llama el bar), pues eso mismo, un tributo a Silvio Rodríguez, que después de haberlo escuchado y cantado parte de mi adolescencia hasta aburrir a todos a mi alrededor no ha vuelto a estar dentro de mi (cada vez más abultada, con cara, manos y pies e incluso mentalidad de Gollum) colección de discos. Pues bien, rendidos y transpirados, variamos el camino hacia el este y acabamos en un barcito chiquitito y dulce, con luz cálida y caras amistosas, allí por fin pude beber unas cervezas, mientras “monje” estoico seguía mi conversación (con un jugo inmenso de piña coronado con una cereza fifí en la orilla de un copón) cada vez más llena de datos salpicados, un verdadero coctail de ideas que pocas veces acabo de explicar (una vez más lo hice). Él, me miraba como un viejo sabio que tiene frente de si a una oveja descarriada o... un ser involucionado que no paraba de meterse eso que él llama “basura”, basura en jerga monjesca es igual a “cerveza, cigarros, sexo fortuito, trasnoche, etc”, como ustedes me pregunté que hacia yo con tal extraño ser frente de mi, con el cual las conexiones casi nulas convirtieron a mi boca en un monologo interminable de lo que viví, vivo y quiero vivir, debo decir en mi favor que le pregunté que opinaba de esto y aquello, de lo otro, de esa, de él, de la muerte de la ministra en Ecuador, de lo bobo que es Bush, de si Fidel estaría vivo, sobre el calentamiento global y la pequeña gigante que persigue a un rinoceronte, incluso le pregunté si su vida era muy aburrida tan exenta de –eso mismo- “Vida” (al menos de la mía), pero nada, él mi amigo monje, que es algo así como mi propio ET, alguien exento de maldad y oscuras intenciones, prefería escucharme blablabizar, yo acabe por ceder a tan jugoso ofrecimiento y terminé (amos no existe) tipo tres de la mañana algo cansada, muy liberada de tanta cosa que no había dicho, con un cuarto menos de pulmón y cuatro cervezas que apagaron la sed exquisita que me (nos no existe) provocó buscar el famoso bar “Nada Perfecto” para escuchar el sonido de Bómbix Mori en el centro de la capital, debo agradecer la paciencia de ET, pero también debo decirle que aun no entiendo por qué sale de noche si no le gusta, creo por primera vez que guarda una ansia loca por lanzarse, hacer algo así como el hombre increíble, ponerse verde quizás, dejar de pensar en que es bueno o malo y pensar en que quiere hacer! Pero eso es harina de mi amigo ET.
PD: Ciriaco avisa pa' la otra

1 comentario:

Ciriaco Pescador dijo...

Mi amor!!, avisé!!, pero tarde, de todas formas, sé que no debo avisar a más nadie que a tí.

Ciriaco Pescador